lunes, 31 de diciembre de 2007

Un buen año que se va. Otro interesante que se avecina

En los últimos días he estado haciendo balance de este año 2007. Puedo decir que en lineas generales ha sido un buen año. Casi todas las expectativas marcadas al inicio del mismo ha salido adelante o han quedado perfiladas para concretar en este 2008.
El 2007 me ha deparado el conocer a mas de una personalidad histórica del movimiento obrero español. Allá por el lejano mes de enero, el día 25 para ser mas exactos, pude entrevistar en su casa al hoy desaparecido Gregorio Gallego. Pasé una interesante tarde con él, charlando sobre diversos datos de la formación del movimiento anarquista en Madrid, de la Guerra Civil en la capital y de la dura vida que marcó el franquismo a partir del 1 de abril de 1939. Una agradable velada que se vio prolongada en numerosas llamadas telefónicas hasta que el 3 de diciembre nos dejó. Con Gregorio se marchaba uno de los testimonios mas claros y fehacientes de un periodo trascendental de la historia de España.
Pero este año también pude entrevista a Santiago Carrillo. El 9 de febrero puede ir a su casa y conversar con él sobre como actuaba la organización del PCE en interior durante los años 40. Era necesario tener el testimonio de Carrillo, ya que el trabajo que venía desarrollando sobre la explosión del polvorín de Alcalá de Henares, tenía en Santiago Carrillo una pieza fundamental, ya que él a esas alturas (septiembre de 1947) era el responsable de la organización en el interior. Interesante conversación también con Carrillo, aunque de muchas cosas que me dijo no estoy de acuerdo.
Este año también también conocí a Fernando Macarro Castillo, mas conocido como Marcos Ana, poeta del PCE y que en su juventud militó en las JSU de Alcalá de Henares. Aunque no pude cruzar muchas palabras con él, conocerle fue ver un mito que en Alcalá era denostado cara a cara. Fue una suerte poder saludar a Marcos Ana en el Circulo de Bellas Artes en la presentación de su libro de memorias Decidme como es un árbol.
Pero quizá uno de los peores días fue el 30 de marzo. Ese día celebrábamos en el Ateneo de Madrid un acto homenaje por el 30 aniversario del mitín de San Sebastián de los Reyes que la CNT organizó. Poco antes de iniciar el acto me dieron la noticia del fallecimiento de mi amigo Fernando Nacarino Moreno. Nacarino tenía 86 años, pero con él había pasado muchas tardes conversando sobre miles de historias, entre ellas su condena a 30 años por la explosión del polvorín de Alcalá, del que era inocente. Su muerte nos privaba de una mente prodigiosa y de una enseñanza viva. La historia andando tendría en Nacarino el mejor exponente. Su muerte fue muy sentida para mí, y aun hoy se me hace un nudo en la garganta cuando hablo de él. Nos queda muchas horas de grabación con él y una vida ejemplar a seguir. Pero como él decía el hombre no muere sino que se transforma en otras cosas porque el cadáver da vida a otros seres vivos. Muchos Nacarinos andarán hoy por ahí. Nuestra misión es hacer que su memoria no sea mancillada por los de siempre. Y en ello trabajamos.
Pero este año también me ha deparado grandes sorpresas. He podido conocer a gente como Cubo de Rubik o Utopía (me reservo los nombres para mí, aunque muchos sabrán de quien hablo) Cubo de Rubik es familiar de un histórico del anarquismo del que llevo mucho tiempo trabajando. Al conocerla a ella esas ganas por conocer a este personaje se triplicaron. Tanto ella como Utopia han representado para mí algo importante en este año. Volver a ver valores que creía perdidos y sobre todo que un trozo de ese gran militante del anarquismo madrileño todavía anda por las mismas calles que él, que tiene sus mismos pensamiento e inquietudes y que nos ayudan a seguir adelante.
El 2007 ha sido el año de concretar publicaciones. Para el primer trimestre del 2008 se pueden concretar tres publicaciones. Dos están seguras. La explosión del polvorín del Puente Zulema de Alcalá de Henares. 1947 (que ya ha tenido un anticipo con la publicación de una comunicación en el II Congreso de Historia del PCE que se celebró en Madrid en el mes de noviembre) y un trabajo sobre Mujeres Libres esta en liza. El tercero no lo anticipo pues aun no se sé si será en ese primer trimestre, pero a lo largo del año saldrá. A nivel editorial no se que mas me puede deparar el 2008, pero desde luego alguna cosa estoy barajando y veremos como la concreto. Mi tesis sigue adelante y mas que tras la visita al Archivo de la Guerra Civil en Salamanca pude concretar una muy buena parte de la misma, sobre todo lo que respecta al periódico republicano y de la Guerra Civil. A parte este año 2008 volvemos a vernos en el Encuentro de Historiadores del Valle del Henares, donde habrá que presentar trabajo, nos metemos de lleno en el centenario de la CNT y están las oposiciones a secundaria para el mes de junio. Cita ineludible y que marcará parte de mi futuro profesional.
Como comentaba antes la visita a la bonita ciudad de Salamanca fue toda una experiencia. No solo por lo que encontré en su rico Archivo del expolio franquista sino porque conocí una ciudad preciosa, que en muchas de sus partes me recordaba a mi Alcalá de Henares. Lo mismo mi breve visita a Santiago de Compostela en agosto. Puedo decir que tanto Salamanca como Santiago me enamoraron profundamente. Ya han pasado algunos meses de eso y parece que fue ayer. Tengo también algunos planes de viaje para este 2008.
No voy a narrar la cantidad de actos a los que he asistido y de los que he participado (el final del año con el 90 aniversario de la Revolución Rusa ha sido intenso), presentaciones de libros, lecturas que he tenido (que medianamente las voy introduciendo en este blog, aunque son muchas más), pues se haría un post interminable. Los mismos las cuestiones a nivel mas íntimo y personal, donde el año ha sido realmente bueno. He podido reafirmar muchas amistades, encontrarme con viejos conocidos y recuperar sensaciones que hacía mucho tiempo que no tenía Por muchos motivos el 12 de octubre de este año, coincidiendo con un día tan carca, para mí la vida cambió un poco o mucho (sobran pues las palabras)
Pero no todo ha sido positivo. A parte de la muerte de Nacarino, donde familiares cercanos míos han dejado de existir en este 2007, uno de ellos al que guardaba especial cariño. A nivel político no se ha podido concretar muchas cosas y otras han quedado excesivamente en el aire. Muchas veces no todo lo que pensamos nos sale bien.
Aun así no me quiero dejar atrás que este año nuestra revista Germinal ha seguido adelante. Con mas y mejores trabajos. Y que el 2008 seguirá adelante y que tendrá una larga vida.
Podemos decir que ha sido un buen año. Que las vacas flacas desaparecieron. Que agradezco a mucha gente que ha estado a mi lado y me ha apoyado y creído en en lo que hago (a mis amigos, que son muchos, a mis editores, que también son mis amigos, a mi familia, etc.) El 2008 tiene que ser mejor que el 2007, lo que nos hace poner el listón muy alto y las expectativas muy fuertes.
El próximo post será ya en el 2008. Muchas cosas me dejo por valorar, pero no doy para más.

domingo, 23 de diciembre de 2007

La Memoria Histórica y Melchor Rodríguez

Un periódico local de Azuqueca sacaba hace pocos días un artículo de Roberto Mangas titulado Memoria histórica para el Ángel Rojo, donde hace una breve reseña de la personalidad y actuación del anarquista Melchor Rodríguez.

Pero es realmente triste el enfoque da en el artículo, realmente tendencioso y utilizando una figura excelente en la historia de España para arrimar la leña al objetivo que pretende este periodista.

Los primero porque el artículo esta lleno de errores, debido a que quien lo escribe demuestra su escaso conocimiento histórico. Cuando hace mención al bombardeo de Alcalá de Henares por el cual Melchor Rodríguez evita la matanza en la cárcel Galera, el autor dice que fue un bombardeo contra el campo de aviación. El bombardeo se produjo contra la población civil en Alcalá aquel 8 de diciembre. Y esto lo atestigua la cantidad de documentos sobre el mismo (Eligio de Mateo Sousa: “memorias de guerra, memorias de exilio” en Historia 16, número 167, Marzo de 1990, Pág. 119.) o las entrevistas realizadas por mí para el desarrollo de mi tesis doctoral sobre el movimiento obrero en Alcalá de Henares. Quizá el señor Mangas debería de informarse mejor en una próxima ocasión o dejar de manipular datos para sus propios intereses.

Lo segundo que las sacas de presos no se producían de “checas estalinistas” como dice el señor Mangas, sino de la Cárcel Modelo de Madrid, de la cárcel de San Antón o de Porlier entre otras. Que dichas sacas son frenadas efectivamente por Melchor Rodríguez a partir de diciembre de 1936, enfrentándose duramente con Carrillo y José Cazorla, que estaban al frente de la Consejería de Orden Público de la Junta de Defensa de Madrid. Pero también las frenan los decretos de Juan García Oliver al frente del Ministerio de Justicia, durante ese tiempo. El que hoy denominan algunos como “pistolero faista” tuvo una notable actuación frente a un ministerio, aquello contra lo que había luchado toda su vida.

Nuevamente el autor comete la torpeza de nombrar determinados personajes sin conocer la realidad. Habla de otros anarquistas como el tal Joseph Serra, cuyo testimonio ha salido por obra y gracias de un tal Miquel Mir. Según Mir encontró en los archivos de la FAI en Londres el diario de Serra (o Sierra según otros sitios) donde contaban las andanzas de su grupo en Barcelona. Pero parece que el señor Mangas no ha leído el libro o sencillamente ha dado por valido todo lo que allí se esgrime. Porque de entrada los archivos de la FAI no han estado nunca en Londres sino en Ámsterdam. Porque el libro de Mir cae en errores como decir que a Durruti lo manda a Madrid Cipriano Mera. O que el grupo “Los Solidarios” celebraron la muerte de Salvador Seguí, máximo exponente del anarcosindicalismo catalán en la década de 1910, para controlar la CNT. Sin fuente, sin pruebas, sin ningún tipo de documento, se pontifica y se establece verdades con el único objetivo de barrer para su casa. Cosas en las que coincide el señor Mangas, el señor Mir, Pío Moa o César Vidal.

Pero todavía va más allá el artículo sobre Melchor. Afirma el señor Mangas que Melchor Rodríguez fue detenido tras la Guerra y que pasó pocos años en la cárcel porque personalidades de derechas hablaron bien de él ante las autoridades. Y es cierto. Pero hay que ir más allá. No cuenta el señor Mangas que cuando fue juzgado el Juez le dijo a Melchor Rodríguez: “Usted se ha comportado como un cristiano”. Melchor Rodríguez contesto: “No. Yo me he comportado como un anarquista” Algo difícil de entender para mucha gente actual, pero cierto, pues el anarquismo parte de los valores humanistas. Pero esconde el señor Mangas que durante el franquismo Melchor Rodríguez siguió siendo hostigado. Fue condenado a 30 años de cárcel tras la Guerra, si bien se le rebaja condena. Pero posteriormente sufrió hasta 34 detenciones, una de ellas con pena de muerte incluida por participar en la reconstrucción clandestina de la CNT. Es decir, que la benevolencia que el señor Mangas nos intenta dar de las autoridades franquistas para con Melchor Rodríguez, es más que tramposa. Lo mismo que ese “compadreo” que quiere hacer ver entre cenetistas y franquistas en el entierro de Melchor Rodríguez. Mas que nada porque el franquismo reprimió hasta la extenuación a los anarquistas hasta casi aniquilarlos por completo

Un consejo de historiador. Dejen de manipular la historia. Dejen de acusar y de pontificar. Me gustaría decir, que eso que denominan checas no eran tales. Las checas fueron prisiones secretas del Partido Comunista que se escaparon al control gubernamental. Lo que la historiografía de derechas denomina checa no son sino las prisiones del Frente Popular. Y en las cuales a la altura de noviembre de 1936 quedan clausuradas por orden gubernativa, cuando García Oliver es ministro de Justicia. Que en la retaguardia republicana se pusieron todos medios para evitar las matanzas indiscriminadas, de las cuales solo Paracuellos fue la mancha negra de la República. Porque no se produjo una matanza igual en todo el territorio republicano. Sin embargo en la zona rebelde, posición que controlaban se convertía en represión indiscriminada. Los casos de Granada, Córdoba, Sevilla, Málaga, Toledo, Badajoz, Guernica, etc., son pruebas irrefutables de la política que el general Mola estableció desde el principio: el terror contra el enemigo.

Dos cosas rápidas para terminar. Me gustaría saber cual es el delito y la checa que dirigía Largo Caballero, que por cierto no era “el pequeño Lenin” sino “el Lenin español”, según la denominación de la época (lean un poco, por favor) Y por último, dejen en paz a personajes excelentes como Melchor Rodríguez, porque esa táctica de crispación que actualmente están llevando algunos es precisamente contra la que luchó Melchor Rodríguez y la que padeció bajo los años de franquismo.

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Convocatorias de interés para los próximos días

Como no hay nada como cerrar el año en la misma linea que se empieza, os paso tres convocatorios para los próximos días, dos de las cuales donde participo directamente como ponente.

DÍA 20 DE DICIEMBRE. JUEVES.
Charla sobre el 90 aniversario de la Revolución Rusa. 19:00h. Alcázar de Toledo. Proyección del vídeo "La Revolución rusa. Historia de Rusia, 1905-1924" de 20 minutos de duración y luego charla debate.

DÍA 21 DE DICIEMBRE. VIERNES
Charla sobre la Transición organizada por el Grupo Volia de la FAI. Teatro de la Aguas (Calle de las Aguas) a las 20:00 horas.

DÍA 28 DE DICIEMBRE. VIERNES
Proyección del vídeo "Néstor Majnó. Un campesino de Ucrania" A las 19:30 en la librería La Malatesta (Calle Jesús y María, 24)

Aquí lo dejo para quién le interese.

sábado, 15 de diciembre de 2007

"Los girasoles ciegos" Una novela del antifranquismo

Bien es cierto que el antifranquismo y la lucha contra el régimen liberticida que Franco instauró en España, es motivo de numerosas obras, ya sean históricas, ensayísticas, literarias o de otra índole. Pero la obra de Alberto Mendez Los girasoles ciegos, que ahora esta en pleno proceso de adaptación cinematográfica, es sencilla, directa y con un leiv motiv constante a lo largo de la obra. La derrota en la Guerra Civil, como el primer paso para sepultar las esperanzas de un pueblo que comenzaba a desarrollarse. Y Alberto Méndez, fallecido no hace mucho, lo hace de una manera peculiar, a través de cuatro historias, que pueden parecer inconexas, pero que tienen la derrota como punto de partida.
La primera de la historia cuenta como un capitán del Ejército franquista se pasa a la zona republicana pocas horas antes que los rebeldes tomen Madrid. Este capitán nunca se vio como vencedor, no compartía los laureles de una Victoria formada sobre el odio cainita. Y prefiere irse con los derrotados a quedarse con los verdugos. Detenido nada mas llegar a la zona republicana, ya en completa desbandada por el naufragio final republicano, es juzgado por las autoridades vencedores, fusilado pero no rematado, y huido acaba en la cárcel. Alberto Méndez define esta primera derrota en 1939 como "Si el corazón dejara de latir".
La segunda historia es de un poeta republicano muy joven, que ha dejado embarazada a su compañera y tienen un niño. Ella muere y el va huyendo en una travesía sin salida. Escribe su vida a través de un diario y poemas. El final trágico de la historia completa la segunda derrota, ya en 1940 y con el título "Manuscrito encontrado en el olvido".
La tercera cuenta una peculiar historia. Un detenido que había actuado en la retaguardia republicana es juzgado por Enrique Eymar por la muerte del hijo de este juez instructor, que pasa a la historia de España como un asesino sanguinario. Mas de 1000 muertes atesora solo Eymar en sus manos. El hijo de Eymar durante la Guerra Civil fue fusilado por delitos comunes de trafico de medicinas y estraperlo en el Madrid republicano. En la historia de Mendez, el detenido, para ganar tiempo, cuenta que el hijo de Eymar era una buena persona que fue fusilada. Eso hace que la madre del fusilado mantenga una relación con ese preso que se va librando del fusilamiento. Finalmente el protagonista confiesa todo a Eymar y su esposa, el porque del fusilamiento de su hijo. Y automáticamente la pena de muerte sobre el protagonista es ejecutada. Esta tercera historia, de 1941, la llama Mendez "El idioma de los muertos". En esta historia destacaríamos también como se muestra la vida carcelaria de Porlier, donde tantos presos políticos del franquismo penaron.
La última de las historia habla de un diácono lascivo que persigue a la madre de uno de los niños de la escuela, a la que cree viuda. El marido de esta, republicano y masón, es un topo que se esconde en su casa y que vive de traducciones (era profesor de Literatura) que después firma su esposa. La historia es contado por el diácono, que escribe una carta al obispo, por el hijo del republicano, y por el narrador. La perseverancia del diácono hace descubrir el secreto y nuevamente el final es trágico. Esta cuarta historia, datada en 1942, le da el título de "Los girasoles ciegos"
Cuatro historia con un único tema. La derrota. La derrota de una esperanza, de unas ideas, de una manera de entender la vida. Y esa derrota trae con ella la muerte. La muerte física pero también moral.
Alberto Méndez nos muestra con esta novela que también la literatura nos puede hacer partícipes de lo que fue aquella larga noche de la dictadura.

lunes, 10 de diciembre de 2007

La represión franquista en el cine


Hace pocas fechas se ha estrenado en las pantallas españolas película de Emilio Martínez-Lázaro "Las 13 rosas". Cuenta la historia de trece jóvenes muchachas de las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU), asesinadas impunemente por la maquinaria franquista en lo que fue el inicio de esa larga noche de la dictadura.Lo primero que hay que aclarar en este artículo es que a pesar de que las 13 rosas no sean anarquistas, la sensibilidad que a cualquier anarquista nos produce la injusticia provocada por un régimen como el franquista, montado sobre el odio, la opresión y el oprobio, no es un acontecimiento que podamos pasar por alto. Muchas de estas jóvenes, menores de edad, eran idealistas que tenían toda la vida por delante y que de forma súbita se la cortó el capricho de un régimen liberticida y criminal. Ellas son 13 nombres entre muchos nombres, muchos de ellos de anarquistas, que perecieron bajo la dictadura asesina de Franco.Pero si el acontecimiento y el hecho podría haber dado para hacer una buena película que mostrara toda la crueldad generada por el franquismo, lo cierto es que el director no ha cumplido su objetivo. La película es inconexa, no deja clara la ideología que perseguían las jóvenes muchachas y acontecimientos trascendentales como para entender la tragedia se presentan como martillazos sin sentido, que de no conocer la historia de las 13 rosas es difícil de saber por qué aparecen ahí. Este último aspecto se ve cuando el asesinato del comandante de la Guardia Civil, Isaac Gabaldón Irurzún. También por la acusación que pesa sobre ellas de intento de asesinato a Franco el día del Desfile de la Victoria. Martínez-Lázaro, más acostumbrado a comedias como "El otro lado de la cama" no ha sabido tratar este acontecimiento.Lejos de las críticas que podamos hacer a la ideología que defendían las JSU o su papel en la Guerra Civil española, la muerte de estas trece chicas se convierte en uno de los episodios más trágicos de la inmediata posguerra. Siete de las trece chicas eran menores de edad (entonces la mayoría de edad estaba marcada en 21 años) y el escándalo por este acontecimiento fue tal, que desde entonces no se fusiló a ningún menor de edad más. Y más teniendo en cuenta que el odio que tenían las autoridades contra todo lo que olía a "rojo" llevó a fusilar a estas jóvenes tan solo 48 horas después del suceso, cuando todavía no se había recibido ni el visto bueno de Franco para la ejecución.Es difícil tratar un acontecimiento como un fusilamiento, pero lo que no se puede hacer de esto es materia gratuita. Se prefiere no contar una historia en el cine a contarla de forma deficiente. Por otra parte, un ejemplo de buen trabajo documental alrededor de este acontecimiento es el que nos ofrecieron José María Almela y Verónica Vigil con "Que mi nombre no se borre de la historia", título tomado de una frase de Julia Conesa, una de las fusiladas aquella trágica mañana del 5 de agosto de 1939. Se reconstruye un documental donde se narra los últimos días de la Guerra Civil en Madrid (quizá aquí es donde puede quedar mas cojo el documental, por insistir en algunos lugares comunes) hasta el fusilamiento de las jóvenes. A través de testimonios e imágenes de la época, se hace un alarde de buen montaje cinematográfico bajo un guión trabajado y bien estructurado, por lo que la historia de de las 13 rosas queda muy bien explicada.Lo mismo cabría decir del libro de Carlos Fonseca. Este periodista reconstruye esta historia en "Trece rosas rojas", donde tras un trabajo de investigación en archivos militares, consultando la causa generado por ellos (la 30426), contrastando los datos con testimonios y documentándose bibliográficamente sobre la época, presenta un trabajo interesante y bien cimentado.Está claro que las 13 rosas son asesinadas por el hecho de ser militantes antifranquistas. De esto no hay ninguna duda. Da por ello verdadero asco cuando determinados personajes del inframundo derechista, como Pío Moa, dice que aquellas jóvenes no eran inocentes porque eran estalinistas. Cuestión que para Moa es suficiente como para proceder a su fusilamiento.Pero el trabajo de Martínez-Lázaro, lejos de aclarar y poder rescatar bien el tema, deja un mar de dudas. Lo primero porque como hemos dicho más arriba la película es inconexa y tiene muchísimas lagunas, que al espectador en más de una ocasión le puede hacer perderse. Lo segundo porque en las escenas carcelarias parece como si las presas estuvieran de vacaciones en la cárcel de Ventas. Esta prisión fue una de las más terribles de la inmediata posguerra. Impulsada durante el período republicano por la directora general de Prisiones, la radical-socialista Victoria Kent, tenía una capacidad para unas 400 presas. Con el final de la Guerra Civil en 1939 la prisión de Ventas albergaba a más de 3.000 personas hacinadas entre sus muros. Por ello se abusa en demasía de los recursos cinematográficos de mujeres cantando, atusándose el pelo, bailando claque en el patio de la prisión o haciendo bromas en la misa de la cárcel. La vida en las prisiones era mucho más dura y más terrible de lo que cuenta la película. Y más si tenemos en cuenta que eran presas sobre cuyas cabezas recaía la petición de pena de muerte (aunque es cierto que existían esos cantos sobre la prisión). En cuanto a la elección de las actrices, los mejores papeles lo representa Pilar López de Ayala (Blanca Brisac) y Marta Etura (Virtudes González). El resto esquematizan mucho a los personajes. Aparecen incluso personajes poco definidos como el que se hace pasar por novio de Julia Conesa, que unas veces aparece vestido de requeté y otra de militar sin explicar el porqué. O el personaje de la carcelera Carmen Castro, interpretado por Goya Toledo, que desde luego es un recurso cinematográfico del director.Pero no todo son críticas a la película. El acto de un fusilamiento también tiene una parte sentimental de despedida. Y el final de la película, cuando entran en capilla y redactan sus últimas cartas a sus familiares, y al ser trasladadas a los muros del Cementerio del Este para ser ejecutadas, está bastante logrado. Sabe trasmitir la tensión de los últimos momentos de unas personas inocentes que mueren por sus ideas. Y es entonces cuando te acuerdas de tantos miles que pasaron por las mismas circunstancias en esa España de cruz y bayoneta, en esa España de las esperanzas aplastadas bajo la bota militar y la sotana clerical.Está claro que todo esto son reflexiones particulares tras ver la película. Cada cual podrá sacar la lectura que quiera. Pero desde luego que un acontecimiento como este, y otros muchos similares, hubiese merecido un mejor trabajo.
Mauricio Basterra

sábado, 8 de diciembre de 2007

Un texto de José Saramago más que recomendable

Hace pocas fechas un buen amigo mío que se pasea por este blog me obsequió con un libro de José Saramago titulado Ensayo sobre la lucidez. Tengo que reconocer que a pesar de la importancia del autor jamás había leído nada de Saramago. Mi gran amigo Canichu llevaba bastante tiempo hablándome de esta novela. Y tengo que reconocer que tras su lectura me ha parecido una obra mas que recomendable.
La obra sería la segunda parte de Ensayo sobre la ceguera, aunque se puede leer de manera independiente. En la primera parte Saramago nos traslada a una ciudad, que nunca identifica, donde todo el mundo se queda ciego.
Pero esta segunda parte (la primera no la he leído) tiene una fuerte carga política. Esa misma ciudad se enfrenta a unas elecciones municipales, donde concurren los denominados Partido de la Derecha, Partido del Centro y Partido de la Izquierda. El pueblo tiene una reacción frente a esas elecciones de hacer una masiva utilización del derecho al voto, pero depositando este en blanco. Un tanto por ciento corto vota a los partidos políticos, de los cuales sale ganador el partido de la derecha.
Desde ese momento, el gobierno monta toda una campaña, mostrando que tal acción es una conspiración, problamente dirigida por grupos anarquistas u otros de tendencia "extremista".
Saramago nos traslada aquí a todo lo que significa el universo estatal para encontrar siempre un culpable a una situación de la que el solo es responsable. Ejercer el voto es legitimo, pero el voto en blanco no gusta y se toma como una conspiración. Manipulan datos, dan informaciones completamente deformadas con vista a encontrar esos culpables que no existen. El gobierno del Estado abandonan la ciudad. Hay divisiones entre ellos de como llevar la crisis.
Dentro de los personajes de la obra destacaríamos el alcalde de la ciudad, que finalmente ve como se esta manipulando todo y, a pesar del partido de la derecha, no duda en ningún momento en ponerse con el pueblo ante una injusticia tal. Mas teniendo en cuenta que se produce un atentado en la ciudad, en la que culpan a los grupos que supuestamente organizaron el voto en blanco, pero en realidad esta llevado a cabo por los servicios secretos del Estado. Por otras parte el comisario de policía que lleva adelante la investigación montada por el Ministro del Interior y que se da cuenta, igualmente, de que se esta manipulando los datos para llegar a culpar a gente inocente.
Todo lo que nos muestra Saramago esta mas cerca de la realidad que de la ficción novelística. Porque solo hay que recordar como los Estados han manipulado datos para llevar a cabo sus campañas y sus invasiones. No olvidemos la manipulación que el Pentágono llevó a cabo para justificar la Guerra en Iraq o la que el PP realizó tras el 11-M y toda la teoría conspiranoica posterior. Todo pruebas evidentes de la descomposición de un sistema que pretende presentarse como "el mejor de los posibles" y que no duda de tachar en terrorista a todo aquel que pone en duda su statu quo. Porque los enemigos que se genera el Estado han sido forjados por ellos mismos. El caso de Al Qaeda y de Osama Bin Landen es bastante evidente entre muchos más. Sus verdaderos enemigos, aquellos que buscan un mundo mejor y mas justo, son perseguidos con la mayor fiereza o condenados al ostracismo por los grandes emporios de los mass media de la sociedad capitalista.
Desde luego que la obra de Saramago es muy recomendable. Es de lectura fácil, ágil y amena. Los comentarios son marcados por comas y no por guiones aparte. A pesar de ello nunca se pierde el hilo de la lectura. Y aunque hacen referencia a datos de la primera parte de la novela, en ningún momento te pierdes en los datos porque lo explica todo.
Para terminar dos cuestiones. La primera agradecer a mi amigo Canichu que me obsequiara con esta obra. Muchas gracias compañero. Ha sido una lectura muy interesante. Y lo segundo recomendar a todos aquellos que quieran la lectura de esta obra del portugués José Saramago.

martes, 4 de diciembre de 2007

En memoria de Gregorio Gallego


Ayer por la mañana me dieron la noticia del fallecimiento de Gregorio Gallego. Para muchos será un completo desconocido, pero durante un momento en la historia de España fue una de las personalidades que estuvo al frente de la defensa de Madrid en las duras jornadas de asedio de las tropas rebeldes sobre la capital.

La muerte de Gregorio tengo que reconocer que fue un jarro de agua fría. A pesar de que tenía 91 años y una salud estaba ya muy deteriorada. Tuve la oportunidad de entrevistarle el pasado febrero y con ello recogí un testimonio de gran valía sobre la Defensa de Madrid y la dureza de la represión franquista. Amable, cercano y conversador, en los últimos momento de su vida decía que solo recibía a compañeros. También el pasado año charlé un rato con él con motivo de la presentación de las memorias de Cipriano Mera Guerra, cárcel y exilio de un anarcosindicalista , personalidad a la que Gregorio conoció.

Gregorio Gallego (19 de julio de 1916-3 de diciembre de 2007) nació en Madrid. Muy aficionado a los temas literarios en 1933 se adhiere a la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y a la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (FIJL) En 1936 participa en el Ateneo Libertario de Puente de Toledo y pertenece al Comité Peninsular de las FIJL. Por esas fechas edita su primera novela en la serie "La novela Ideal" con el título En las garras de la lujuria.

Al estallar la sublevación militar participa del aplastamiento de la misma en Madrid y desde septiembre forma parte de la primera Junta de Defensa de Madrid por la CNT entre septiembre de octubre de 1936. Posteriormente se desplaza al frente y participa en varias batallas. Todas sus memorias sobre el Madrid prebélico y su participación en los primeros meses de Guerra nos lo trasmite en su sensacional libro Madrid, corazón que se desangra, donde hace un amplio y ameno recorrido sobre sus vivencia e impresiones.

Terminada la Guerra Gregorio es detenido y pasa a los campos de concentración, batallones de trabajadores y numerosas prisiones (Madrid, Alcalá de Henares, etc.) Liberado en 1943 comienza a participar en la reconstrucción de la CNT clandestina. Entre ese tiempo y su nueva detención en 1944, se convierte en el Secretario General de la Regional Centro y en miembro del Comité Nacional. Fue condenado a 30 años de presidio y no volverá a recobrar la libertad hasta 1963. Cuando sale de la cárcel, Gregorio participa del cincopuntismo, movimiento de acercamiento entre algunas personalidades históricas del movimiento libertario y del sindicalismo vertical de Franco. Actuación que causó horror entre el movimiento libertario y por ello criticados duramente.

Esto le hace alejarse del movimiento libertario organizado y se vuelca en tareas literarias. Junto con Ángel María de Lera, antiguo militante del Partido Sindicalista, y Eduardo de Guzmán, que fuera redactor del periódico anarquista Castilla Libre, funda la Asociación Colegial de Escritores.

Con la muerte de Franco, si bien Gregorio se acercó por Ateneos y Sindicatos, no se volvió a implicar de lleno en la vida confederal, no mostrando su visión sobre la escisión que sufrió la CNT en 1979 y 1983. Escribió y vivió junto a su compañera Visitación Lobo, hermana del artista Baltasar Lobo.

La obra de Gregorio Gallego es copiosa. Escribió biografías de Goya, Kennedy, Colón y Benjamín Franklin. Colaboró en Juventud Libre, Castilla Libre (durante la República y la Guerra Civil), La hora de mañana y Polémica. Su obra literaria (no muy depurada) es la siguiente:

En las garras de la lujuria (1936)

Ardiente verano (1976)

Asalto a la ciudad (1984)

Campo de Gibraltar (1992)

Los caínes (1973)

Encrucijada de caminos (1992)

El hachazo (1966)

Hacia el triunfo (1937)

Hombres en la cárcel

Las Juventudes Libertarias ante el pueblo (1937)

Madrid, corazón que se desangra (1976)

La Maraña (1966)

Márgara, crónica de la clandestinidad

La otra vertiente (1972)

Esto es lo que hoy nos queda de Gregorio Gallego. Una vida de lucha, con aciertos y errores, y una obra literaria a rescatar (muchas obras de Gregorio están reeditadas por la editorial "Ediciones Libertarias-Prodhufi")

Desde aquí solo podemos decir: "COMPAÑERO GREGORIO, QUE LA TIERRA TE SEA LEVE"